La Jornada
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, informó que una línea de investigación apunta que los padres de los niños asesinados en Juchitán, Perla y Wilbert Daniel, de 9 y 6 años, recibieron amenazas.
“Parece que hubo con anterioridad un problema entre los padres, no entre sus padres, sino con otras personas y pues fueron amenazados y les decían que iban a castigar donde más les dolía. Esa es una ruta de investigación”.
La Fiscalía de Oaxaca señaló que ambos cuerpos fueron hallados a las 7:05 horas del pasado sábado, en la carretera Juchitán- El Espinal, de la vía denominada canal 33, y se determinó que la muerte de los hermanos ocurrió por asfixia entre dos y cuatro horas de antelación.
“Muy lamentable, muy triste, la verdad yo lamentó mucho lo ocurrido por los niños, eran pequeños de nueve años, seis años que fueron pues asesinados, terrible, los padres estaban separados, no vivían… vivían con unos familiares y pues los niños eran obligados a ir a vender sus cositas todas las tardes”, dijo el mandatario.
Señaló que el reporte de la fiscalía es que fueron ahorcados.
El secretario de Seguridad Pública de Oaxaca, Iván García Álvarez, dijo que los menores tenían un año vendiendo algún tipo de frituras y se introducían en algunos bares de la zona.
Adelantó que hay varias líneas de investigación relacionadas con algunos familiares, pues los niños se encontraban con la abuelita y con una de las tías.
Dijo que los padres vivían separados y pues existían alguna situación de disfuncionalidad familiar.
De acuerdo con la Secretaria de Seguridad y Protección Ciuadadana (SSPC), del 1 de enero y hasta el 17 de febrero de este 2023, suman 127 homicidios dolosos en Oaxaca.