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Alfredo Martínez de Aguilar (@efektoaguila )
* El destino del mundo está en los votos de Pensilvania, Georgia, Carolina del Sur, Míchigan, Wisconsin, Arizona y Nevada, considerados estados péndulo, cuyos resultados son definitorios.
* Al margen de que se confirme el triunfo del candidato republicano Donald Trump, México enfrentará la encrucijada del desafío para reformular su política exterior ante Estados Unidos.
El avance del conteo por la presidencia de Estados Unidos confirmaba las preferencias hacia Donald Trump, lo que perfilaba anoche la tendencia ganadora del expresidente republicano.
En una reñida disputa electoral, al cierre de esta columna, Trump ganaba 188 votos electorales de 18 estados de la meta de 270 votos para ser declarado Presidente, Harris 99 votos en 9 estados.
Asimismo, el conteo parcial del voto popular sumaba a favor de Donald Trump 36 millones 760 mil 406 votos (52%), mientras que Kamala Harris obtenía 32 millones 614 mil 978 votos (46%).
Han triunfado en los estados que tradicionalmente apoyan a los partidos republicano y demócrata. El destino de las elecciones depende de los resultados en siete estados clave aún sin definir.
El destino del mundo está en los votos de Pensilvania, Georgia, Carolina del Sur, Míchigan, Wisconsin, Arizona y Nevada, considerados estados péndulo, cuyos resultados son definitorios.
Esta tendencia motivó a la comunidad cubanoamericana en Miami empezar a celebrar la victoria de Donald Trump en Florida, desde el famoso Restaurante Versailles de la Pequeña Habana.
En el ámbito federal, en la elección se elegirá la Presidencia y Vicepresidencia de Estados Unidos; 34 de los 100 miembros del Senado, y los 435 miembros de la Cámara de Representantes.
Al margen de que se confirme el posible triunfo del candidato republicano Donald Trump, México enfrentará la encrucijada del desafío para reformular su política exterior ante Estados Unidos.
La prioridad para el nuevo gobierno estadunidense seguirá siendo el control de la migración irregular, pero cuyo principal riesgo estará más bien en el área de la política comercial binacional.
Ciertamente, México está más expuesto que ningún otro país al triunfo de Trump; pero la tensión en la revisión en 2026 del T-MEC permanecería, incluso, con la candidata demócrata Kamala Harris.
A esta presión se sumará prioritariamente el tráfico de drogas, especialmente de Fentanilo hacia Estados Unidos, y la consecuente violencia desatada por los cárteles del narcotráfico en México.
Para no ir tan lejos por un ejemplo concreto, el pasado fin de semana un comando robó varias unidades de carga con concentrados ricos en oro, plata, plomo y zinc de la mina Peñasquito.
El yacimiento es propiedad de la empresa estadounidense Newmont. No se ha recuperado el material robado sobre la carretera Zacatecas-Saltillo. Esperemos presiones de Estados Unidos.
La situación de México es comparable a la de Ucrania, bajo la angustia de su futuro inmediato por las amenazas de Trump de cesar la ayuda de EU para enfrentar al Presidente ruso Vladímir Putin.
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