Si tu experiencia con alguna entidad del sistema financiero mexicano no ha sido la mejor y piensas que de haberlo sabido antes nunca lo hubieras contratado, ahora será posible tomar mejores decisiones respecto a la institución financiera de tu preferencia.
Ello, porque con la promulgación de la Reforma Financiera se establece la creación de un Buró de Entidades Financieras, en el cual se pretende integrar toda la información que resulte relevante sobre su desempeño y los servicios que ofrecen.
¿Pero para qué te servirá todo eso? Recuerda que la información es poder y debes usarla a tu favor. Con ella decidirás si la institución con la que te encuentras cumple con tus expectativas y necesidades, o de lo contrario eliges cambiar a una que sí las cumpla.
Actualmente existen las llamadas Sociedades de Información Crediticia (SIC), comúnmente llamadas burós de crédito, en las cuales se refleja un historial de todas las personas que acceden a un crédito de manera formal.
Éstas son consultadas por las instituciones financieras para conocer qué tan buen pagador eres y con base en ello decidirán si te prestan o no. El Buró de Entidades Financieras tendrá la misma función: evaluar la conveniencia para el usuario de contratar un servicio en el sistema financiero del país.
Condusef, la responsable
La Comisión Nacional de Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) establecerá y mantendrá el nuevo buró de acuerdo con el decreto de la Reforma Financiera, el cual se integrará con la información que obtenga de las instituciones y los usuarios en el ejercicio de sus atribuciones.
Es decir: sus sanciones administrativas, las reclamaciones que realicen los usuarios, no sólo en el otorgamiento de crédito, sino también en los servicios que prestan como las cuentas de afores, seguros y ahorro, explica Abraham Vergara Contreras, especialista del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana.
La relevancia de este buró, asegura, es que los usuarios tendrán al alcance información que les permitirá tomar decisiones más correctas sobre a qué institución recurrir, lo que incluso incidirá directamente en
las tasas de interés.
Lo anterior, debido a que en el momento en que las instituciones financieras entren a una competencia evaluada, en donde su desempeño se refleje en un ranking tendrán que competir mejor y su forma de hacerlo no es otra que la tasa de interés que ofrecen a sus clientes.
Explica que en este caso podría verse cómo la tasa de interés pasiva, es decir, la que pagan por ahorrar se incrementa, mientras que la tasa de interés activa, o la que cobran por el otorgamiento de un crédito, disminuye.
Para Gerardo Aparicio, director de la licenciatura de Administración y Finanzas de la Universidad Panamericana, el antecedente de la creación de este buró es fortalecer la cultura financiera, ya que la Reforma tiene como objetivo principal que se otorgue más crédito y más barato.
Pero este objetivo sólo podrá cumplirse si los usuarios del sistema financiero tienen mayor información que les permita comparar e incluso saber cuál está ampliamente recomendado.
Esto terminará de una vez por todas con la paradoja del sistema financiero, la cual reconoce su fortaleza, sin embargo, presta muy poco, asegura el especialista de la UP.
En cuanto al usuario, insiste que una vez que se integre este buró no habrá más pretextos como el clásico “es que yo no sabía”, porque ahora la información estará a su alcance y la decisión de usarla será sólo de él mismo.
Buró de Crédito Universal
Otro de los cambios que trae consigo la Reforma Financiera es la conformación de un Buró de Crédito Universal que manejará el gobierno y que amplía las fuentes de información.
Actualmente si tienes un crédito ya sea personal, automotriz o hipotecario en el sistema financiero mexicano automáticamente apareces en buró, igual que si tienes una tarjeta de crédito o has contratado servicios de telefonía o televisión de paga.
Ahora además de esa información se integran créditos como el de Infonavit y también el pago oportuno de los impuestos.
Para el profesor del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana, con ello el usuario pierde un poco de secreto bancario, sin embargo, asegura que no afectará a los buenos pagadores, ya que estar registrado no es malo.
“De entrada estar en el buró de crédito no es malo, lo que es malo es tu reporte, tu conducta de pago, es lo que nos debería preocupar”, indicó.
Por ello recomienda tener un buen historial crediticio, para lo que es necesario pagar puntualmente tus deudas y de esta manera ser sujeto de crédito nuevamente.