México obtuvo una calificación de 5.03 en calidad democrática en 2013, lo que implica un retroceso de más medio punto respecto al 5.56 que obtuvo en 2012, según el Índice de Índice de Desarrollo Democrático (IDD) que elabora la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) junto con la Fundación Konrand Adenauer y Polilat, con el apoyo del Colegio de México.
Es el segundo descenso consecutivo en dos años, pues también en 2012 México tuvo un retroceso en el IDD respecto a 2011.
El índice considera 32 variables que en conjunto suman 10 mil puntos, así que “después de haber alcanzado un valor promedio de 5 mil 560 puntos, en la medición de 2012, el promedio general del IDD-Mex 2013 empeoró casi un 10 por ciento, registrando 5 mil 037 puntos”, puntualiza el estudio.
Al presentar los resultados del índice, Juan Pablo Castañón, dirigente de Coparmex, sostuvo que “en los últimos años, a través de nuestra experiencia como observadores electorales y mediante instrumentos como el IDD-Mex, hemos atestiguado el desencanto de los mexicanos con el sistema político. Esta decepción ciudadana obedece a la falta de resultados en seguridad pública, crecimiento económico y empleo, pero sobre todo al divorcio que existe entre la agenda de los partidos políticos y la de la ciudadanía”.
Advirtió que “la solución no es el autoritarismo”, sino aquilatar y fortalecer las instituciones democráticas que hemos construido en los últimos 30 años”.
Según la Coparmex el IDD “es consistente con mediciones internacionales que han reportado un descenso en la calidad democrática de México, en comparación con otros países latinoamericanos”.
El indicador, que se ha levantado por cuatro ocasiones en México, evalúa la calidad de la democracia en cuatro grandes ámbitos: indicadores de democracia formal; respeto a los derechos políticos y libertades civiles; calidad institucional y eficiencia política así como ejercicio del buen gobierno con resultados en materia de política pública que aseguren tanto bienestar o equidad para la población como eficiencia económica.
En el promedio nacional, durante 2013 “la sub dimensión social alcanza un promedio inferior al logrado el año anterior, mientras que la subdimensión económica presenta un rendimiento muy superior al del 2012”, precisa el estudio.
El IDD hace un seguimiento permanente a la calidad democrática de los gobiernos estatales, detecta debilidades y fortalezas de cada uno a fin de ayudarlos a mejorar, según el sindicato patronal.
El estudio atribuyó el retroceso democrático de México durante el último año a un aumento del número de estados del país que tienen mínimo desarrollo democrático respecto a aquellos que cuentan con un alto desarollo.
“Otro hecho destacable es la variación de posiciones entre entidades, año tras año, lo que estaría indicando también que ningún estado destaca por políticas continuadas de alto desarrollo democrático. Sólo Baja California Sur y el Distrito Federal han mantenido algún nivel de homogeneidad en las cuatro mediciones realizadas, entre las entidades de mejor desempeño”.
De las 7 entidades que lideraron la medición del IDD-Mex 2012, en 3013 sólo 3 de ellas continuaron en la porción superior del ranking, aunque con variaciones en sus posiciones. Se trata de Baja California Sur que del primer lugar pasó a la segunda posición, Yucatán del quinto lugar ascendió al primero y el Distrito Federal se mantuvo en el cuarto sitio.
En el extremo contrario, los estados que componen el grupo de menor desarrollo democrático son México, Durango, Puebla, Chihuahua, Guerrero y Tamaulipas.
Se destaca que Tamaulipas en el lugar 31 del ranking general, Chihuahua en el 30° y Durango en el 28, han sido afectados principalmente por el clima de violencia y su consecuente afectación de derechos y libertades.
Los datos del IDD-Mex se obtienen a través del seguimiento y evaluación de variables sociopolíticas pero también de la realización de estudios de percepción aplicados por los 65 centros de Coparmex en el país a empresarios, líderes de opinión y medios de comunicación.
Castañón planteó que “ahora que el sistema político mexicano está en el centro de la discusión, Coparmex pone en la mesa del debate público, el IDD-Mex 2013, como un instrumento para enriquecer la agenda de la deliberación y para promover una nueva generación de reformas que vayan más allá de la discusión electoral y nos permitan avanzar en la construcción de gobiernos eficaces, transparentes y con una efectiva rendición de cuentas, avanzando así, en la construcción de mejores condiciones para todos los mexicanos”.