Consignan a novio que ordenó el asesinato de su pareja por negarse a abortar

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La Procuraduría General de Justicia del estado consignó a Manuel Forcelledo Nader, al confirmar que contrató a dos sujetos para que asesinaran a su novia, Karla López Albert, quien tenía cinco meses de embarazo.

El procurador Víctor Carrancá Bourget informó que además de Forcelledo Nader, de 28 años de edad, se consignó ante el juzgado de San Pedro Cholula a Leopoldo Camacho Vázquez, Rodrigo Augusto Solís Cano y Moisés Cordero Hernández como presuntos cómplices del feminicidio cometido el 30 de enero de este año. Los cuatro implicados en este crimen permanecían en calidad de arraigados.

La madre de Karla, María Esperanza Albert Razo, ubicó desde un principio a Forcelledo como posible responsable del asesinato de su hija, de 34 años de edad. El novio estaba en desacuerdo con el embarazo y le había insistido a su pareja en abortar. El día de su desaparición, Karla se dirigía a entrevistarse con el ahora inculpado.

De acuerdo con las investigaciones, la pareja sentimental de Karla entregó un pago inicial de 7 mil pesos a Solís Cano y a Cordero Hernández para que lo ayudaran a planear y a cometer el asesinato, en tanto que Camacho Vázquez le vendió el chip de su celular para que Forcelledo pudiera comunicarse con la víctima sin ser ubicado.

El presunto autor intelectual y material del homicidio habría citado a López Albert el 30 de enero en un salón de fiestas propiedad de su familia, ubicado en la Recta a Cholula y Periférico, bajo el engaño de que había comprado un seguro de gastos médicos para cubrir el parto del hijo de ambos.

En ese lugar, Forcelledo Nader y sus cómplices golpearon a Karla López hasta que perdió el conocimiento y después la estrangularon con un lazo de rafia.

Cordero Hernández y Solís Cano, quienes habían trabajado como guardaespaldas del exrector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y excandidato del PRI a la alcaldía de Puebla, Enrique Agüera, colocaron el cuerpo de la mujer en la cajuela del automóvil de la víctima.

Solís Cano se llevó el automóvil al Distrito Federal y mantuvo el cuerpo en la cajuela hasta el 2 de febrero, cuando decidió abandonarlo en un paraje de la delegación Tláhuac.

En ese lugar fue localizado por autoridades locales y permaneció en calidad de desconocida hasta el 7 de febrero, cuando se confirmó que se trataba de la mujer que había sido reportada como desaparecida por sus familiares desde el 31 de enero.

La madre de la víctima brindó a la Procuraduría un número telefónico que su hija traía apuntado en un papel entre sus pertenencias. Ese número, desde el cual se realizaron llamadas a Karla el día de su desaparición, estaba registrado a nombre de Leopoldo Camacho Vázquez, quien presuntamente lo vendió a Forcelledo.

La Procuraduría precisó que realizó alrededor de 500 diligencias entre cateos, rastreo de llamadas de celulares y análisis de computadoras.

Tras la examinación técnica de los elementos encontrados en las investigaciones, primordialmente el celular de Forcelledo Nader, se obtuvieron mensajes que habían sido borrados y que ponían de manifiesto el acuerdo entre los implicados, en relación con las circunstancias y fecha en que podría ejecutarse el homicidio de López Albert.

“A través del análisis de los distintos números telefónicos de cada uno de los sujetos pasivo y activos del delito, se logró georreferenciar que tanto la víctima como los hoy consignados, coincidieron durante un lapso estimado de una hora y media, momento en el que sucedió el feminicidio”, precisó la dependencia.

Cabe señalar que desde 2012, el Congreso de Puebla tipificó el delito de feminicidio, el cual fue calificado como delito grave, con una pena de 30 a 50 años de prisión.