Estudiantes oaxaqueños triunfan en Rumania; obtienen dos medallas de plata y una de bronce

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A simple vista parecen unos robots arcaicos, no se contempla que puedan derribar a otro elaborado con tecnología de punta, pero hay que comprobarlo en la plataforma de combate llamada Dohyo; comienza la batalla y la eliminación de equipos, el respeto al grupo de oaxaqueños se ha ganado.

Es la final mundial del International Computer Project Competition “Infomatrix 2014”, un concurso internacional de proyectos de informática organizado por Lumina Instituciones Educativas y el Ministerio de Educación Nacional, para animar a la juventud a aplicar su imaginación, pasión y creatividad a las innovaciones tecnológicas que pueden hacer una diferencia en el mundo actual, el cual se realizó del 8 al 13 de mayo en la ciudad de Bucarest, Rumania.

Dicho encuentro convocó a jóvenes de 34 países, de los cuales, tres son oaxaqueños que participaron en esta justa, y apoyados por el Gobierno de Oaxaca, a través del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (COBAO) y el Monte de Piedad. Los talentos compitieron en la categoría de combate “minisumo” y obtuvieron dos medallas de plata y una de bronce al representar al estado de Oaxaca, y por ende a México y a toda América Latina.

Sus nombres son Daniel Luna López y Carlos Ortega Romero, ambos alumnos del cuarto semestre del COBAO 01 -ubicado en la agencia Pueblo Nuevo- quienes obtuvieron una medalla de plata y otra de bronce, respectivamente, al enfrentarse con estudiantes de esta especialidad en 10 países.

La contienda se realizó contra 80 equipos de jóvenes de preparatoria y universitarios provenientes de Turquía, Irán, Irak, Rumania, Polonia, Austria y Bélgica, por mencionar algunos.

El tercer oaxaqueño es Sebastián Larrazábal Santaella, alumno del sexto semestre de Ingeniería Mecánica en la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) unidad Culhuacán, del Instituto Politécnico Nacional (IPN), quien consiguió medalla de plata al ubicarse dentro de los 12 equipos finalistas de la categoría.

El orgullo de Daniel, Carlos y Sebastián por destacar en el medallero mundial de robótica

Daniel, Carlos y Sebastián, formaron parte del equipo de mexicanos que se posicionó en el tercer lugar a nivel mundial en número de medallas al conseguir 23, solo por debajo de Turquía con 31 y Alemania con 49, de un total de 34 países que participaron en las diferentes competencias.

“El evento fue emocionante, competir con otros países y medirnos en la calidad de los proyectos que a pesar de que la tecnología mexicana no es tan avanzada generamos respeto. Al inicio hubo comentarios de que nos derrotarían con facilidad, pero con el esfuerzo logramos avanzar”, expresó con felicidad Daniel Luna.

Carlos agrega que participar en este concurso le generó gozo, porque a su edad y el empeño que ha dedicado a la electrónica ha sido fructífero. “Invito a las y los jóvenes a que le echen ganas y hagan lo que les agrade, puesto que no solo depende tomar la iniciativa por una clase”, dijo.

La dinámica del encuentro consistió en derribar al contrincante de manera autónoma, es decir, a partir de que el robot inicia su rutina, éste no puede ser controlado por ningún medio externo, ya que toda decisión debe ser tomada por sí mismo.

Para llegar hasta Rumania, los dos estudiantes de preparatoria se inscribieron al club de robótica del COBAO 01, surgido por inquietud del alumnado y del profesor Alejandro Arenaza Villavicencio, después de obtener la medalla de oro en el “Robomatrix 2014”, organizado por la Sociedad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (SOLACyT), llevado a cabo en marzo, en Guadalajara, Jalisco.

“Para diseñar nuestro robot de 10 por 10 centímetros investigamos de forma autodidacta cómo funcionan los materiales, y a través del diseño mecánico, electrónico y de programación es como logramos obtener resultados positivos”, explicó Carlos Ortega Romero.

En tanto, Sebastián, pertenece al Club de Robótica de la ESIME Culhuacán (CREC) y participó con su robot al que nombró “Burrito”, el cual también le permitió obtener un primer lugar en el encuentro realizado en Guadalajara.

“Me llena de alegría participar en las competencias de robótica y obtener buenos resultados. En este momento es cuando me doy cuenta de que todo el esfuerzo, trabajo y dedicación rinde frutos, trae momentos y oportunidades tan grandes como este encuentro”, destacó en entrevista por Internet.

A partir de este concurso, los tres jóvenes no solo compartieron el diálogo intercultural y la cooperación por medio de su participación, también adquirieron conocimientos, que en el caso de Daniel y Carlos, les ha permitido plantear sus metas al estudio de la mecatrónica.

Mientras que para Sebastián, esta fue una oportunidad que le permitirá mejorar su trabajo y en los próximos torneos nacionales e internacionales, obtener mejores resultados.

“Esta experiencia ha mejorado mi conocimiento y sabiduría, así como las ganas de seguir avanzando. Deseo que mi gusto por armar, desarmar, innovar y crear sea para bien de la humanidad. Aprovecho la ocasión para compartir a la juventud oaxaqueña que nada es imposible y con esfuerzos y dedicación no existen límites ni barreras”, manifestó Daniel Luna.

Finalmente, el profesor Alejandro Arenaza Villavicencio, convocó a los maestros a enfrentar la zona de confort y apoyar al alumnado con potencia y creatividad; a las instituciones de ciencia a respaldar las escuelas que la producen y a los gobiernos a involucrarse y creer en las mentes brillantes que existen en Oaxaca y en el país.