Al menos 20% del mercado nacional de gasolinas y diesel está en manos de la delincuencia organizada, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas).
El combustible más vendido por los criminales a menor precio es la Magna y el diesel, debido a que son los que normalmente se utilizan en las zonas apartadas, de acuerdo con la agrupación.
Pablo González, presidente de la Amegas, detalló en entrevista que el producto hurtado a Petróleos Mexicanos (Pemex), ya sea por tomas clandestinas o robo de pipas, es ofrecido en las orillas de las carreteras y caminos rurales.
Para empresarios gasolineros consultados, quienes pidieron el anonimato por cuestiones de seguridad, las terminales más peligrosas para quienes transportan el combustible por tierra son las de Michoacán, Tamaulipas, Veracruz y Jalisco, principalmente.
Destacaron que, pese a los esfuerzos de Pemex y de la autoridad, aumentan los casos en que las estaciones de servicio son controladas por la delincuencia organizada.
Según datos de Pemex citados en un análisis por el investigador Ramses Pech, en el país existen cuatro mil tomas clandestinas que representan una pérdida diaria de 27 mil barriles de combustible. Las tomas clandestinas representan entre 6 y 8% del consumo total del día, añade.
La delincuencia arrebata 20% del mercado a los gasolineros
Ante el importante aumento en el número de tomas clandestinas a los ductos de Petróleos Mexicanos, empresarios gasolineros ya calculan que al menos 20 por ciento del mercado de gasolinas y diesel a nivel nacional, ya ha sido acaparado por la delincuencia organizada.
Aseguraron que aun cuando la petrolera nacional se encuentra colaborando de manera estrecha con el gobierno federal, esto no ha sido suficiente para resolver el problema, por lo que ya no sólo aqueja a la mencionada empresa, sino que también le ha hecho perder competitividad a los franquiciatarios.
En entrevista, Pablo González, presidente de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas), aseguró que a pesar de que se sabe sobre la venta de gasolinas y diesel en el mercado negro, éste no ha logrado ser erradicado.
De tal forma que el producto robado a Pemex se sigue vendiendo a las orillas de las carreteras y caminos rurales, sin que haya algún detenido, sin embargo, a esta modalidad ya se le suma con mayor notoriedad la comercialización que se realiza en estaciones de servicio que ya son controladas por el crimen organizado.
Aseguró que dicho producto es vendido por los delincuentes en precios que oscilan entre los seis a ocho pesos por litro, cantidad muy por debajo de los precios que han sido establecidos por la Secretaría de Hacienda, lo cual ya le has generado una reducción importante de sus ventas.
“En México hay un inconveniente con el que no podemos competir que se llama mercado negro de gasolinas, que es muy grave y no podemos competir con esos niveles. Lo que tenemos afuera es un riesgo, la mafia vende del 10 al 20 por ciento y más barata”, dijo el presidente de Amegas.
“Lo que le falta a los poliductos es por la presencia de las tomas clandestinas, esto significa que incluso ya hay gente que casi pone su poliducto particular y luego lo desconectan”.
Denuncias
En reunión con Excélsior, empresarios gasolineros de diversas partes del país, que prefirieron el anonimato, dijeron que a este problema se suma el robo de pipas y sobre todo el pago por “derecho de piso”, que puede alcanzar hasta los 50 mil pesos y que les son exigidos por la delincuencia organizada.
Sin embargo, cuando los delincuentes, quienes en el mayor de los casos llegan armados y con amenazas, no encuentran a los dueños de las estaciones de servicio, llegan a exigir a los empleados cuotas hasta de dos mil pesos.
Explicaron que en este contexto y con los cambios que comenzarán a generarse en el mercado gasolinero, con la llegada de empresas extranjeras y la liberación de precios, luego de la aprobación de la Reforma Energética, los empresarios nacionales, principalmente los pequeños y medianos no podrán competir.
Desabasto de combustible
Sobre el desabasto que se agudizó en días pasados en estados como Puebla, Tlaxcala y Jalisco, a causa de las tomas clandestinas, dijeron que este es problema que también se ha presentado en regiones de Michoacán, Zacatecas, San Luis Potosí y Guanajuato, pues también por estos corren ductos de Pemex que son ordeñados, por lo que consideran que esta situación no podrá ser resuelta en su totalidad, al menos en las siguientes dos semanas.
Mencionaron que el combustible más vendido por la delincuencia es la gasolina magna y diesel, pues es el insumo que normalmente se utiliza en las zonas rurales o apartadas, que es dónde tiene su principal nicho de operaciones.
A la venta de combustible robado y extorsiones, dijeron que también se ha sumado el robo de pipas, no sólo de Pemex, sino de empresas privadas o de los mismos gasolineros, quienes en ocasiones no pueden presentar la denuncia correspondiente por estar bajo amenazas.
“En Tepatitlán, se robaron una pipa recién comprada, con tres letras que acabaron de pagar, y en el primer viaje se la robaron, la encontraron hace seis meses y aun no la puede recuperar” por trámites burocráticos.
“Ocurrió un caso de que se presentaría la denuncia, pero la mafia se les acercó, y les dijo que si ‘impones la denuncia te mato a tus hijos’, y la pipa apareció tiempo después ya desmantelada. Ya es un temor de que no se puede ni denunciar”,comentó un entrevistado.
Según los empresarios gasolineros, las terminales más peligrosas para quienes transportan el combustible por carretera son las de Lázaro Cárdenas, Tamaulipas, Veracruz, Jalisco, entre otras entidades.
