El Gobierno del Estado de Oaxaca informa a la opinión pública y a la sociedad oaxaqueña que los elementos de la Policía Estatal que permanecían en paro desde el 31 de enero pasado, acordaron la noche de este martes, levantar el paro de labores y reintegrarse a los servicios de seguridad pública, así como entregar las instalaciones, armamento y equipo táctico que se encuentran en el Cuartel de Santa María Coyotepec.
La administración estatal precisa que los policías inconformes acordaron dar por terminado este paro de actividades a partir de las 21:30 horas de este martes 17 de febrero, para acogerse al mandato de sus superiores, además de restablecerse en sus puestos operativos regionales de manera paulatina, tal como lo mandata la Ley del Sistema Estatal de Seguridad Pública.
El Gobierno de Oaxaca reconoce el ejercicio de reflexión y responsabilidad de las y los elementos de la Policía Estatal, al dar por concluido el paro de actividades, así como su disposición para acogerse a la legalidad y a los códigos de disciplina que regulan el desempeño de la función policial.
Las y los elementos paristas pueden tener absoluta certeza que serán tratados con dignidad y respeto a sus derechos humanos por los mandos y personal directivo de la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca.
La administración estatal expresa que la sociedad de Oaxaca le exige a sus policías, a las instituciones públicas y al Gobierno del Estado, ofrecer más y mejores resultados, además de redoblar su mística de servicio en favor del interés supremo del estado. Asimismo, conmina al personal de todas las instituciones de seguridad pública de la entidad a redoblar esfuerzos, a fortalecer lealtades y honrar el deber de prevenir el delito y proteger la integridad física y patrimonial de la población.
La administración que encabeza el Gobernador Gabino Cué Monteagudo, expresa su reconocimiento y gratitud al Gobierno de la República por el apoyo profesional y solidario que están brindando a la seguridad de las y los oaxaqueños, en particular, al personal de la Policía Federal al mando del Comisionado General de esa dependencia, Enrique Francisco Galindo Ceballos. Se acredita también la intervención y mediación del Licenciado Arturo Peimbert Calvo, Defensor del Pueblo de Oaxaca, cuyo desempeño contribuyó para lograr la distensión de la controversia.