A solicitud de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, los periodistas Gonzalo Domínguez Monroy, director del diario El Imparcial del Istmo, y Jesús Hiram Moreno, director del semanario Evidencias, se encuentran ya bajo medidas de protección instrumentadas por el gobierno del estado con el fin de garantizar su seguridad física en el desempeño de su trabajo.
Así lo informó el defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo, quien precisó que la Policía Estatal se comprometió a proporcionar a partir de este jueves acompañamiento policiaco a los dos comunicadores, pues se encuentran bajo amenaza después de haber sido agredidos la semana pasada por haber publicado un trabajo de investigación periodística.
Explicó que Hiram Moreno, también corresponsal del diario estatal Tiempo, fue golpeado el pasado martes 24 de marzo y Domínguez Monroy fue secuestrado al día siguiente, ambos en Salina Cruz, y posteriormente han sido amenazados como represalia por publicar en distintos medios –ambos son colaboradores también de radiodifusoras locales– información que implica a diversos actores políticos locales.
Para este organismo autónomo, expresó el defensor Arturo Peimbert, es de vital importancia proteger el aporte democrático del trabajo que realizan las y los comunicadores, pues éste es una invaluable vía para que el resto de la sociedad tenga acceso a información sobre la vida pública, que es prerrequisito para que todas las personas puedan ejercer plenamente otros derechos humanos.
El agravio a una o un periodista con el fin de obstaculizar su trabajo informativo o de opinión no sólo afecta a la o el profesional, sino a la sociedad en su conjunto, pues priva a ésta de elementos que orienten su criterio y sus acciones para fortalecer la convivencia democrática en el marco de las leyes, explicó el ombudsman.
Por ello, añadió, los gobiernos tienen responsabilidades especiales para la protección de la labor periodística.
Calificó como una tragedia social que haya necesidad de medidas especiales de protección para salvaguardar el trabajo de las y los comunicadores, con serias repercusiones también en los ámbitos familiar y personal, y destacó la valentía de los periodistas que han decidido continuar su trabajo a pesar del contexto adverso en el que lo desarrollan.
Hiram Moreno, también director del semanario istmeño Evidencias, ha recibido agresiones desde 2012 por su trabajo periodístico. En julio de 2014 nuevamente denunció recibir amenazas de muerte derivadas de su función como comunicador.
En la misma región, en octubre de 2007 tres colaboradores del diario El Imparcial del Istmo fueron asesinados en una emboscada.
En relación con las agresiones recientes, el ombudsman Arturo Peimbert expresó su reconocimiento al comisionado de la Policía Estatal, Víctor Amado Alonso Altamirano, y al comandante regional de la misma fuerza estatal, inspector general Meinardo Cruz Ramírez, por su disposición para aplicar medidas dirigidas a salvaguardar la integridad física de los periodistas.
También reconoció el compromiso asumido por el fiscal de Investigación de Delitos de Trascendencia Social, Samuel Castellanos Piñón, quien a invitación de la Defensoría se desplazó al istmo de Tehuantepec para supervisar el inicio de los procesos penales a los que haya lugar derivados de los agravios contra Domínguez Monroy e Hiram Moreno.
Finalmente, Peimbert Calvo informó haber instruido a la Defensoría especializada en protección a periodistas, defensoras y defensores de derechos humanos para que dé seguimiento cercano a las medidas cautelares en curso, con el fin de verificar su cumplimiento puntual por parte de las autoridades.