En plena campaña política, el Instituto Nacional Electoral (INE) cambió las reglas para sancionar irregularidades detectadas en los informes sobre gastos de precampaña partidistas, lo que provocó inconformidad de los representantes de las fuerzas políticas.
En la sesión del Consejo General del INE hubo tantas modificaciones que ni los partidos ni los consejeros tenían certeza sobre las cifras precisas de las multas que aprobaron ayer en relación con la fiscalización de las precampañas en ocho estados. El presidente de la Comisión de Fiscalización, Benito Nacif, previó que el monto total se redujo de 17 a 15 millones de pesos y que el partido más multado seguirá siendo el de la Revolución Democrática (PRD), con 12 millones de pesos, pero los números finales se conocerán hoy.
Los consejeros debatieron el tema durante siete horas y terminaron por endurecer algunos criterios, porque ahora los partidos deberán pagar sus multas de manera inmediata al INE y recibir sanciones económicas en vez de una amonestación por las faltas formales que cometan.
La propuesta del consejero Ciro Murayama, de cobrar las multas en cuanto sean aprobadas sin esperar la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), generó el rechazo de los representantes partidistas.
Argumentó que como la fiscalización ya es expedita las sanciones también se deben pagar de inmediato aunque serán depositadas al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el destinatario final, hasta que el tribunal las califique.
Pablo Gómez, del PRD, expresó que el INE no es un banco y no tiene autorización para andar deteniendo dinero y que será el Tribunal el que dará claridad sobre ello.
Insistió que los candidatos paguen las multas y no el partido político, pero no recibió ninguna respuesta clara.
Marco Antonio Baños difirió de sus colegas, porque establecieron un criterio distinto al que aparece en el Reglamento de Fiscalización, arguyendo que está previsto en la norma constitucional. En otros puntos, hasta Nacif votó en contra de la mayoría.
Otra medida que generó molestia fue la de cambiar la amonestación por una multa de 700 pesos cuando los precandidatos cometan faltas no graves como presentar de manera extemporánea sus informes de gastos.
El priísta Jorge Carlos Ramírez Marín dijo no entender por qué se cambia la amonestación a una multita y qué es lo que se pretende impulsar con ello.
Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, intentó justificar este viraje de última hora y dio la bienvenida a las impugnaciones para que den certeza al trabajo de fiscalización.
La discusión derivó también en un intercambio de acusaciones entre los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM), Morena y el PRD.