Por: Moisés Molina Reyes
Solo cuatro opiniones equilibradas he encontrado en medio del océano de apasionadas descalificaciones y juicios condenatorios contra el Partido Verde Ecologista de México. Esas cuatro opiniones gravitan en torno a dos ideas centrales:
1) El verde ha sido multado injustamente
2) No hay motivo para pensar en la pérdida del registro del partido
Luis Carlos Ugalde, ex consejero presidente del entonces IFE, en su artículo “El secreto del éxito” del 13 de abril (http://www.milenio.com/tribunamilenio/quien_gana_cuando_gana_el_verde/multas_Partido_Verde-Partido_Verde_Ecologista-elecciones_2015-escandalos_PVEM_13_499280068.html ); Víctor Sáchez Baños en su entrega del 15 de los corrientes para Eje Central que tituló “Con el miedo que me tengan” ( http://www.ejecentral.com.mx/pvem-con-el-miedo-que-me-tengan/ ); Ricardo Alemán en La otra verdad bajo el título de “Otro palo al verde” (http://laotraopinion.com.mx/nota.php?pid=2108) ; y José Woldenberg quien el 17 de este mes escribió “El remedio y la enfermedad”( http://laotraopinion.com.mx/nota.php?pid=2107 ), argumentan sin apasionamiento y sin ánimo de defender al Partido Verde.
En el fondo del castigo monetario y mediático al verde subyace el capricho de al menos tres partidos que sin talento ni imaginación no acaban de entender su ineficacia a la hora de comunicarse con su electorado.
Ensimismados en sus conflictos internos, el tempo se les fue y cuando reaccionaron la única estrategia (la que mejor les sale, por cierto) que les quedaba era la campaña negra.
¿Por qué precisamente el verde? Por la posibilidad real que el partido tiene de alcanzar a ser el tercer partido más importante de México y por la magnitud del daño que esto representaría a los intereses de otros partidos políticos.
En el verde decidimos –es nuestra convicción- no pelear una guerra sucia. Optamos por responder a cada descalificación, a cada golpe, únicamente con trabajo y propuesta.
Nos queda claro, igual de claro que al resto de los partidos, que si alguna causa alejó a los ciudadanos de las urnas fue la confrontación y la violencia verbal entre los partidos y al interior de los partidos. La diferencia entre el verde y los partidos o los personajes de siempre, incluido un transexenal estiba en que mientras ellos le apuestan al abstencionismo y al voto nulo, nosotros llamamos a la participación.
¿A quién le conviene la escasa participación en las urnas? A quienes tienen voto duro que, aunque en declive, han construido a lo largo de décadas y recursos en la cuantía necesarias para movilizar su experimentada estructura.
La abstención del ciudadano les proporciona una zona de confort porque a esos partidos no les importa que solo 40 de cada 100 ciudadanos legitimen a sus diputados, ni que de esos 40 votos, solo unos cuantos sean para la candidata o el candidato ganador.
Oaxaca y México necesitan de la participación de sus ciudadanos y en el partido verde, antes de pedirles un voto de confianza, les pedimos simple y llanamente que salgan a votar y que no anulen su voto, que se tomen tiempo para conocer la propuesta de cada candidato y de cada partido y en función de ello participen en el diseño del presente de este país y de sus estados.
En el verde tenemos cuatro muy concretas que, como lo hemos demostrado en el pasado, vamos a convertir en leyes para beneficio no solo de quienes voten por nosotros, sino para beneficio de todas y todos los mexicanos, especialmente de los jóvenes.
Tres de nuestras cuatro propuestas centrales van para los jóvenes de México:
1) El vale del primer empleo, que va a obligar a l gobierno a entregar este beneficio a los jóvenes dispuestos a integrarse al mercado laboral con un estímulo para el empleador. Este vale será deducible de impuestos.
2) Becas para que los jóvenes no dejen de estudiar por falta de recursos. El PRONABES ha demostrado su insuficiencia. Hay que ampliar la cobertura porque en la educación está la única posibilidad de que los seres humanos sean dueños de su propio destino.
3) Inglés y computación de calidad en todos los niveles educativos, porque son dos herramientas que se han vuelto indispensables en un mercado laboral cada vez más competitivo. Esto sin demérito de la necesidad en estados como Oaxaca, de fortalecer la promoción y protección de nuestro patrimonio cultural, comenzando por las lenguas originarias. Imaginemos un joven que además de hablar su lengua materna, hable el castellano y el inglés.
Adicionalmente y sobre todo pensando en nuestros adultos mayores proponemos los vales de atención médica para que quienes no sean atendidos oportunamente en el IMSS, ISSSTE o a través del Seguro Popular, puedan con este vale acudir a cualquier otra clínica particular y que el gobierno pague.
Castigados debían ser quienes autoritariamente se valen de las siglas de un partido para hacer campaña presidencial anticipada; quienes juegan peligrosamente con el presente y el futuro de la nueva generación ofreciéndoles irresponsablemente la legalización de la mariguana; o quienes con una doble moral pretenden obtener sus triunfos a través de la calumnia, la diatriba y la intolerante descalificación; quienes le apuestan al exterminio.
A quienes nos ven como enemigos, nosotros los vemos como adversarios. El lema del Partido Verde es “Amor, Justicia y Libertad” y vamos a seguir caminando en campaña y fuera de las elecciones de la mano de estos tres principios, siempre respetuosos de la ley, demostrando que el verde sí cumple.
