“El Istmo de Tehuantepec no es un paraíso muxe. Hay segregación, asesinatos, racismo.”
Comenta en entrevista el joven realizador juchiteco Michael Matus, quién admite que si bien su terruño no es un paraíso, si es un lugar en el cual habitar.
“Hay problemas y esas historias que se convierten en una vida también deben de contarse. No todo es idealizar.”
Matus estuvo esta semana en el Festival de Cine de la Riviera Maya, en Playa del Carmen, con su proyecto documental Kalisis, documental sobre el ser muxe (personas nacidas con sexo masculino que asumen roles femeninos) en el Istmo y no perderse en el intento.
El cual ya se hizo acreedor a la beca de la Fundación Ford, Estimulo Centroamericano para la Cinematografía en su vertiente de desarrollo de proyectos, que consiste en cinco mil dólares para la preproducción del documental, clases magistrales, y una entrega final de la carpeta de producción del proyecto.
El cual cuenta Matus que, se ha modificado de su visión original, debido a que el chico en torno al cual giraría la historia, terminó por desertar.
“Ahora está tomando mas forma, será sobre tres muxes con sus historias entrelazadas. Sus sueños, expectativas y memorias. Un muxe en su adolescencia que hablará sobre que espera del resto de su vida, otro que ya está asimilado y solo se viste de mujer.”
Matus presentó en la Riviera la carpeta del proyecto que elaboró en el Campamento Audiovisual Itinerante (CAI) de año pasado. Esto con la finalidad de buscar financiamiento y tomar talleres de creadores cinematográficos nacionales e internacionales.
“Me gusta pensar que Kalisis, será una visión mucho más real del contexto geográfico en el que vivo.”
Comenta Matus, quien considera que esa máxima que dice que en el Istmo toda familia espera que uno de sus hijos le salga muxe es pura charlatanería.
“Durante el proceso de investigación que, he hecho me he encontrado con cientos de casos en los que los golpeaban, con castigos brutales. Hay un proceso de incisión con un chingo de miedo que solo deja traumas.
“Para declararte libremente como muxe en el Istmo, debes de pasar un proceso de dolor.”
Matus recuerda que, la idea del documental surgió cuando un amigo le dijo con una chelas de por medio, que era muxe, esperando cierto rechazo por parte de Michael.
“Yo le dije, no hay pedo, pero si le pregunte porque no me había dicho nada, si en la secundaria jugábamos y yo iba a su casa.”
“Me juntaba con ustedes porque quería verme más hombre.”
Le respondió su amigo a Matus y esto fue más que suficiente para empezar a querer combatir falacias.
“¿Cuánta gente más está sufriendo esto?, de que sus padres no los aceptan, aunque haya un rollo turístico que dice que lo harán.”
Michael quien estuvo en el CAI 2013 Y 2014, y culpa a este esfuerzo de convivencia y gestión audiovisual el que Kalisis se encuentre en camino a ver la luz, cuenta que ya hecho pruebas de video, con una carpeta bien armada, pues su finalidad es regresar de Riviera Maya “con una productora que le quiera meter varo a la peli.”
“En agosto empezamos a filmar con un crew de cuatro personas. Buscó un tratamiento más delicado al tema, con un trabajo de sonido mucho más sensible.”
“Por eso nuestro sonidista es un compa de Nayarit que gano el Cervantino el año pasado y hace paisaje sonoro.”
Matus asegura que todo estará súper detallado en Kalisis, buscando una integración con los personajes en la que no busca ni quiere pagar por entrevistas.
“Siempre se hace, cada año llegan al Istmo de cinco a diez productoras extranjeras y te pagan y empiezan a preguntar tonterías, como que si es cierto que en San Vicente Ferrer se rompió un saco y ahí se cayeron todos los muxes.”
“¿Exótico?, más bien pendejo. ¿Quién puede creer en esas cosas?”