El sacerdote católico y defensor de los derechos humanos de los migrantes, Alejandro Solalinde Guerra, puso en tela de juicio la actuación del Subsecretario de Gobernación Luis Enrique Miranda Nava, quien “no va arreglar nada”.
Luego de hacer un llamado a la sociedad para apoyar y respaldar la lucha de los Jornaleros Agrícolas en San Quintín, Baja California, dijo que el conflicto que desató una confrontación, fue la falta de diálogo y sensibilidad por parte de las autoridades estatales y federales.
“El recorrido y estancia del subsecretario de gobernación en San Quintín, no va a arreglar nada. Ya sabemos que no son personas que busquen la justicia, van para reprimir y amenazar. El problema es que no hay voluntad política, porque de lado de gobernación no hay sensibilidad para ponerse de lado de los jornaleros”, puntualizó.
En este sentido llamó a la sociedad a unirse a todas las formas de lucha pacífica en favor de los jornaleros de San Quintín, Baja California, quienes fueron reprimidos por elementos de la Policía Estatal el pasado sábado.
“Quisiera que hiciéramos conciencia para reaccionar como sociedad civil, primero recobrar la dignidad, creer que es posible cambiar y después, hacer visible todas las formas de corrupción que estamos viendo”.
Solalinde Guerra señaló que estaría dispuesto a sumarse al llamado del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) para buscar los mecanismos de ayuda a los trabajadores de San Quintín, Baja California.
“Son nuestros hermanos más vulnerables y otra vez vuelve a aparecer la fuerza, la prepotencia del estado, no importa el partido que sea, han sido casi iguales; otra vez la represión es para quienes trabajan bajo un clima muy severo y que solamente piden un salario justo”.
De la misma manera puntualizó que la cuestión laboral es una esclavitud y “eso duele”, ya que la reciente reforma laboral aprobada por el congreso da todas las ventajas a los empresarios y todas las desventajas y desprotección para el trabajador.