La mexicana Paola Díaz hizo historia para el triatlón del país, al obtener la primera medalla en los Juegos Panamericanos Toronto 2015, luego de terminar en el segundo sitio de la justa de este día, en donde se aferró al final para entrar al libro de las hazañas en el deporte.
En lo que fue la prueba del triatlón en los Juegos Panamericanos Toronto 2015, la jalisciense, de 23 años de edad, dio la sorpresa al detener el crono en 1:57.48 horas para la medalla de plata, en tanto que el sitio de honor corrió a cargo de la chilena Bárbara Riveros con 1:57.18.
Y el bronce quedó en poder de la representante de Bermudas, Flora Duffy con 1:57.56.
De esta manera, Paola Díaz se convirtió en la mejor de la especialidad en la historia de los Juegos Panamericanos, luego que en Mar del Plata 1995, la mejor fue María Luisa Martínez en el quinto sitio.
Hacer historia de doble manera
Cuando la mexicana Paola Díaz supo que estaba destinada a ser parte de la historia del deporte del país no imaginó que lo haría de doble manera, ya que fue la primera vez que compitió en unos Juegos Panamericanos y además la primera en acceder al podio.
Con apenas 23 años de edad, de los cuales ocho ha invertido al triatlón, Paola jamás pensó que en Toronto sería su primera medalla de grandes latitudes y no sólo por el hecho de debutar, sino porque lo haría con estrategia e inteligencia de su equipo.
Por eso los alrededores de la plaza Ontario, tanto ella como Claudia Rivas, la de mayor experiencia y, Cecilia Pérez, salieron dispuestas a demostrar su calidad, a pesar de tener a la chilena Bárbara Riveros y a la estadounidense Chelsea Burns y a la canadiense Ellen Pennock a rivales fuertes.
Rivas, quien hace cuatro años en Guadalajara 2011 se quedó cerca del podio, comenzó a perder fuerza en la etapa de carrera y un fuerte dolor en la pierna derecha la apresó. Se fue atrás y con el gesto de dolor en el rostro vio como el caminó se hizo más largo.
“Las tres teníamos mucha confianza, todo el equipo nos apoyamos, había motivación y fortaleza de respaldo”, indicó Paola Díaz.
Por eso cuando Claudia se quedó y no pudo más con el dolor, fue cuando tanto ella como Cecilia Pérez decidieron jalar para irse al frente. La chilena Bárbara Riveros había tomado la ventaja para fraguar su triunfo y desde luego obtener un cupo a los Juegos Olímpicos de Río 2016.
“Cuando vi a Claudia que se quedaba, fue cuando pensé que no debíamos perder lo que habíamos hecho juntas, y me fui con todo”, expuso.
Paola Díaz sacó fuerza de todas partes para ir detrás de la chilena Riveros, que estaba al frente por 29 segundos, además de no dejar que la bermudeña, Flora Duffy, quien el ciclismo había estado en la punta.
No había tiempo para dejar de luchar y asegurar la medalla, no la de oro, pero si la de plata.
“Esto significa mucho después de todos los altibajos que he tenido en el año”, fue lo primero que dijo cuando cruzó la meta.
Luego refirió que por el momento su cuerpo está fuerte y no duela nada, pero “al rato ya veremos”.